El aborregamiento
que alimentan los medios electrónicos de comunicación entre millones de mexicanos ha hecho creer a la gente que no había más alternativas ante la crisis que aumentar impuestos, incrementar el costo de las gasolinas y por ende el de todos los productos. Nosotros presentamos más de una vez un proyecto alternativo que, sin impuestos ni aumentos, resolvía el déficit de las finanzas públicas, promovía la producción y protegía el empleo
, aseguró Andrés Manuel López Obrador.
Lo que padece hoy la economía popular es resultado de la prepotencia, el cinismo y la saña del grupo que gobierna al país
, afirmó en entrevista con La Jornada.
Son prepotentes porque desde septiembre, al margen del Congreso, decidieron los aumentos, y son cínicos porque saben que con el control de los medios, principalmente de la televisión, pueden tripular las decisiones, manipular y determinar el modo de pensar de ese grupo de mexicanos que todavía está adormilado y que sigue creyendo que en México no hay de otra, que sólo existe la voluntad de la mafia que gobierna al país.
–¿Qué parte de la crisis se resolvió al aumentar impuestos y precios?
–No resolvieron siquiera el déficit fiscal. Nosotros denunciamos, y hay constancia de ello, que los aumentos los acordó la cúpula que encabeza Carlos Salinas y que operaron sus empleados Manlio Fabio Beltrones en el Senado, Francisco Rojas en la Cámara de Diputados, Felipe Calderón desde Los Pinos y el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto.
Y no sólo nos manifestamos dos veces en la Cámara y una en el Senado en contra de los aumentos, sino que presentamos dos iniciativas: una para promover la austeridad republicana y otra para terminar con los regímenes especiales, particularmente la consolidación fiscal, cerrándole el paso a la cantaleta de que no hay de otra.
Con la primera iniciativa se hubieran conseguido ahorros por 200 mil millones de pesos y con la segunda se obtendrían 300 mil, es decir, 140 mil millones de pesos más que el déficit de las finanzas públicas, indicó.
No resolvieron siquiera el problema de los recursos del gobierno, menos aún el de la carestía para millones de mexicanos.
–¿Qué pasó con sus propuestas?
–Al final, priístas y panistas se pusieron de acuerdo, aprobaron los impuestos y el aumento a las gasolinas y al gas, y de manera mafiosa Peña Nieto y los gobernadores del PRI se repartieron el botín o lo que van a obtener con este nuevo sacrificio de los mexicanos, especialmente en los estados donde este año habrá elección a gobernador.
–Usted advirtió desde septiembre de ese aumento de los combustibles y de lo que eso significaría para el costo de bienes y servicios.
–Dijimos que el aumento a las gasolinas era lo que iba a propiciar más carestía. Entonces preguntaban que de dónde sacaba yo eso, cuando nosotros sabíamos ya de ese pacto de la mafia. Ahora la gente está padeciendo mucho por esos aumentos, y el PRI y el PAN se echan la culpa unos a otros de manera hipócrita, y todo esto con el acompañamiento de los medios de comunicación. De repente aparece como noticia principal en todos los periódicos que Manlio Fabio Beltrones se queja de los aumentos a las gasolinas, cuando él fue parte de quienes pactaron esos aumentos. Sin embargo, aparece como el paladín de la defensa de la economía popular, y en la mayor parte de los medios no se dan los antecedentes ni se le cuestiona para nada.
–¿Por qué trata de desmarcarse el PRI de ese acuerdo?
–Porque es parte del recambio que ya echaron a andar los de la mafia del poder. Ahora está permitido ningunear a Calderón, cuestionar al PAN, pero ya no se toca al PRI ni a Peña Nieto, porque es su proyecto para 2012 y en eso tienen mucho que ver los medios de comunicación.
–¿De qué forma?
–Hay que ver cómo promueven a un actor como virtual presidente de la República. Peña Nieto es el candidato de la tele, es el candidato de Emilio Azcárraga y de la mafia de la política, con todos los riesgos que eso implica. Al mismo tiempo que impulsan a este actor, en una operación de recambio han dejado caer al PAN y a Calderón.
–Ante esto, ¿que es lo que hace su movimiento?
–Nosotros tenemos que concientizar a la gente sobre cómo opera esta mafia que ha venido medrando a costa del sufrimiento de la mayoría de los mexicanos, y llamar a su integrantes por su nombre. Hablar de Carlos Salinas, Claudio X. González, Roberto Hernández, Emilio Azcárraga, de los 10 hombres más ricos del país.
La gente se enoja con los políticos o con los voceros de las cadenas de televisión o radio, cuando ellos sólo son empleados. La culpa del desastre nacional es de ese grupo de potentados que no vamos a poder frenar si la gente no participa de manera ordenada para buscar una verdadera democracia. Hay que crear conciencia de que las instituciones están al servicio de esa cúpula, de que no hay estado de derecho.
–¿Cómo hacerlo con la presencia tan fuerte de los medios electrónicos?
–Hay que entender que el hombre es producto de su circunstancia y no menospreciar el poder de los medios electrónicos. Es mucho mayor de lo que uno se imaginaría la influencia que tienen sobre la población. Esa especie de aborregamiento que se está dando, de falta de conciencia, de adormilamiento entre la gente, es producto del incesante bombardeo de los medios, sobre todo la televisión.
“Ahí está la clave de todo, el principal sostén del régimen opresor es el control que ejercen a través de la televisión. No olvidemos que 75 por ciento de la población en México se entera por este medio, y cerca de 15 por ciento a través de la radio.
“Emilio Azcárraga y los dueños de Televisa, que son al mismo tiempo los 10 hombres más beneficiados de la política económica que se ha aplicado, son los que tripulan el pensamiento de millones de mexicanos.
A pesar de esta tremenda influencia, yo estoy convencido de que la gente va a terminar por despertar. Depende mucho del trabajo de concientización que nosotros hagamos. Por eso es importante que este año sea el de la revolución de las conciencias. Mientras no haya un despertar de conciencias, desgraciadamente las cosas no van a cambiar.