JOSÉ ENRIQUE GONZÁLEZ RUIZ*
Circula por Internet una propuesta que cada día tiene más simpatizantes, que es la del voto en blanco. Se sugiere que vayamos a las casillas y que anulemos la boleta, a fin de que no favorezca a ninguno de los aspirantes a puestos públicos, porque se parte del supuesto de que todos son corruptos, ignorantes y mentirosos.
Ante ese hecho, debemos hacer algunas precisiones:
1.- No sólo personas democráticas, hastiadas de la degradación del sistema político mexicano, están proponiendo la anulación del voto. También el gobierno y sus partidos quieren que no se exprese por este medio la voluntad popular. Y es que ellos tienen una “clientela” asegurada, por medio de los “regalos” que hacen a cuenta de erario y por la enajenación que producen los grandes medios de difusión.
2.- El gran escritor José Saramago habló del voto en blanco, presentándolo como una acción de lucha de personas que quieren expresar un repudio general a todo el sistema. Pero él mismo da cuenta de que esa medida no logra el cambio social anhelado.
3.- La mayoría de la población desconfía de los políticos profesionales, porque son rapaces y falsarios. Pero por fortuna existen todavía personas que conservan la dignidad incluso siendo parte de las cámaras que aprueban leyes antipopulares y antipatriotas.
Por lo anterior, llamamos a ejercer el voto, pero no a ciegas sino con inteligencia. Esto quiere decir, que debe ejercerse selectivamente, estudiando cuidadosamente a cada personaje propuesto. No dejarse llevar por la propaganda, que sólo refleja poder económico y no talento ni compromiso.
Hay que analizar la trayectoria de cada candidato o candidata, para decidir con base en sus hechos y no en sus promesas de campaña. Cuando andan hambrientos de votos, los aspirantes prometen el cielo y las estrellas, aunque saben que jamás cumplirán. El voto inteligente distingue entre el simulador y el auténtico.
El pueblo no es tonto ni ignorante como creen los políticos. No lo comprarán con despensas ni lo amedrentarán con amenazas policíacas ni militares.
VOTA SELECTIVA Y VALIENTEMENTE EL PRÓXIMO 5 DE JULIO.
*Coordinador del programa de derechos humanos de la UACM, profesor de la Facultad de Economía UNAM